A la hora de generar una educación afectivo sexual recogemos valores aprendidos de muchos escenarios de nuestra vida, como el sociocultural, la familia y muy importante en la escuela, todos ellos, y más, ocupan un papel muy importante en nuestra vida. Nuestro comportamiento sexual es un conglomerado de todos estos aspectos y su camino, por ello hablamos de la educación afectivo sexual como un proceso vital en la madurez de la persona, y que a su vez se convierte en un instrumento idóneo de aprendizaje.
Todos nosotros, todos los seres humanos somos seres sexuados, tanto de manera psicológica, como de forma fisiológica. El cuerpo de una persona transmite, habla, siente, sufre aspectos como los sentimientos, la ternura o el afecto, que a su vez influyen en los valores, la educación o la cultura, así se construye el comportamiento humano.
¿Qué representa la educación afectivo sexual?
Representa un pilar básico en la educación de los jóvenes, formando parte de su formación integral. Ayuda a la explicación de muchos procesos trascendentales, como la construcción de la identidad de género o las relaciones afectivas en el mundo de nuestra cultura que nos rodea, y no se queda tan solo en el conocimiento puramente biológico.
El objetivo de construir una sociedad y unas generaciones en las que todos, hombres y mujeres, puedan relacionarse y vivir en total igualdad, inclusiva y con tolerancia cero contra las discriminaciones. Todo ello se consigue dándole la herramienta de una correcta, y de calidad, educación afectivo sexual a los más jóvenes.
Las consecuencias de dar esa herramienta ayudarán a las futuras generaciones en el desarrollo de una sociedad más democrática. Y, por el contrario, se alejará a muchos de crear posibles diferencias sexuales.
Papel de la matrona en la enseñanza de la educación afectiva sexual
Las matronas son y serán actores principales en la vida sexual de las personas. Es por esa razón, por la cual estos profesionales sanitarios asumen ciertas responsabilidades educativas en la construcción de la salud sexual.
Los términos salud y sexualidad siempre irán unidos de la mano, es vital juntarlas y crear la definición de salud sexual como algo vital en el desarrollo educativo humano. Es primordial crear un equipo de trabajo entre los sistemas sanitarios generales y los sistemas educativos, para que ambos formen una educación afectivo sexual común.
Las matronas, como profesionales de la materia, suelen tomar la iniciativa con los jóvenes, ya que no es recomendable dejar en manos de estos que resuelvan por su cuenta ciertas dudas. Hablamos de las matronas, pero esto es un escenario al que se pueden enfrentar otros profesionales como médicos, psicólogos o enfermeros. Existen cuatro fases de como acometer el tema entre profesional y paciente:
Invitar a los pacientes a hablar de temas sexuales, y el hecho de que el profesional tome la iniciativa hace que el paciente se abra más rápido y fácilmente. Es vital crear un ambiente de confianza entre paciente y profesional.
Toda información dada sirve para mejorar los conocimientos sexuales del paciente, eliminar algunos estigmas o mitos sexuales, disminuir la presión que puede generar el tema y aumentar la confianza.
Este escenario se da cuando el conflicto a tratar se produce prolongado en el tiempo, es de mayor complejidad o es un aspecto más específico. En este punto se decide si el asunto debe derivarse hacia un tratamiento intensivo
Aquí entrará en juego el factor de acudir a un especialista en la materia del asunto a tratar. Nunca debe verse como algo negativo acudir a una consulta más específica.
Si tienes alguna duda más, no esperes a pedir cita en tu matrona de referencia y en la web de la FAME también encontrarás alguna información al respecto.